Actividades en Sierra de Los Padres

Reserva integral Laguna de los Padres

Enmarcada en una reserva forestal que abarca un predio total de 687 hectáreas, la Laguna de los Padres tiene una Longitud y un ancho máximo de 2065 y 1700 metros respectivamente.
Presenta una vegetación posible de calificarla en emergida, sumergida y flotante.
Con respecto a su fauna, en el área pueden observarse más de 90 especies de aves que utilizan el sector como zona de alimentación, compartiendo su hábitat con mamíferos y anfibios que conforman a los residentes permanentes del área.
La Laguna de los Padres cuenta con amplios sectores parquizados ideales para la realización de picnics y juegos al aire libre , pudiéndose alquilar botes y fogones. Toda la región es ideal para un safari fotográfico.

Reducción de Nuestra Señora del Pilar

Fundada en 1746 a orillas de la entonces Laguna de las Cabrillas con la finalidad de provocar el asentamiento de las tribus nómades de la zona, la Reducción tuvo una vida efímera, desapareciendo en 1751. La construcción que hoy puede visitarse es una réplica de la original.

Bici Aventura

Recreación deportiva en bicicleta, por caminos rurales y espacios naturales .El cicloturismo permite llegar a lugares naturales sin infringir daños en los mismo, y al mismo tiempo desarrollar una completa actividad aeróbica.
Estarás transitando sobre las rocas más antiguas de nuestro país o bien recorrerás parte de la historia de los orígenes de la ciudad.
Podrás realizar avistamiento de aves cerca de la zona de anidamiento.

Museo Municipal José Hernandez

El 11 de marzo de 1960, un grupo de destacadas personalidades procedieron a fundar una institución destinada a mantener y difundir los valores de la argentinidad con elementos proporcionados por la Dirección de Cultura de la Nación, el Museo José Hernández de la ciudad de Buenos Aires y donantes particulares.
Hoy funciona en lo que fue la estancia Laguna de los Padres a orillas de la laguna homónima fundada por Don Ladislao Martínez Castro, junto a su hermano. Como huésped de estos llega a la estancia por el año 1848 José Hernández de la mano de su padre, permaneciendo en el lugar unos cuatro años. Allí conoció íntimamente las costumbres del gaucho y el contorno en que desenvolvía su existencia; seguramente sus experiencias y recuerdos que conservaría de esa etapa de su vida, le inspiraron la creación del Martín Fierro, obra cumbre de la literatura vernácula.
De la actual colección, merecen destacarse dagas y facones de diverso tipo, manuscritos del General San Martín y de otros patriotas; y entre las obras de arte: pinturas de Castagnino; Monticelli y esculturas de Chacho Waks. El sector Histórico Regional brinda un panorama de la evolución en nuestra región desde 10.000 años A.C al presente.
Bajo uno de los aleros del edificio se pueden ver carruajes del siglo pasado, se destacan el que fuera medio de transporte de pasajeros y la coupé que usara uno de los primeros médicos de la zona, el Dr. Juan H. Jara, para visitar a sus pacientes.
También se halla un monumento a José Hernández erigido en el parque del Museo, obra de la inspiración del escultor marplatense Luis Monticelli.
Asimismo se halla una colección de ejemplares de la obra Martín Fierro de distintas ediciones en castellano e idiomas extranjeros.

Golf club Sierra de los Padres

En uno de los puntos más altos de la sierra, encontramos esta cancha de 18 hoyos y en un marco absolutamente natural, que se caracteriza por poseer greens angostos y fairways quebrados.

Zoológico El Paraiso

Se trata de un espacio turístico recreativo que cuenta con siete hectáreas de bosque. Este particular ambiente sirve de entorno para el desarrollo de una granja con animales domésticos, un sector destinado a especies autóctonas de nuestro continente y una zona de especies exóticas donde conviven Ciervos Colorados, Axis, Damas y Antílopes.

Peñón de Santillán

Se trata de una mole pétrea, digna de estudios, con forma de hongo y de importantes dimensiones.

Gruta de los Pañuelos

En 1949 un matrimonio italiano que no podía tener hijos, colocó dentro de la gruta, una imagen de la virgen, y ató los primeros pañuelos rogándole que le fuera concedido un hijo. A los pocos meses el matrimonio regresó a la gruta agradeciendo por el hijo que esperaban. Con el paso de los años la gruta continuó recibiendo gran cantidad de visitantes, que siguieron anudando sus pañuelos en una larguísima cadena, que ya tiene varios kilómetros.